Los taninos son un compuesto natural que se encuentra en la piel, las semillas y los tallos de las uvas.
¿Recuerdas haber tomado un vino y tener esa sensación astringente que seca la boca?
Estos compuestos son los responsables, sobre todo cuando bebes vino tinto.
Y, aunque te suene técnico, los taninos son simplemente el ingrediente secreto que aporta estructura y carácter a los vinos.
¿Qué son los taninos?
Los taninos son antioxidantes naturales que juegan un papel crucial en la protección de las plantas. En el caso del vino, los taninos ayudan a conservarlo, permitiendo ,que los tintos en particular, puedan envejecer y mejorar con el tiempo.
Al beber un vino con taninos, experimentas una sensación de sequedad en la boca, que es una de las características distintivas de los vinos tintos.
Pero, ¿de dónde vienen los taninos?
Los taninos provienen de varias fuentes:
- De la piel de la uva: La mayor parte de los taninos se encuentran en la piel de la uva, especialmente en las uvas tintas.
- De semillas y tallos: También contienen taninos, aunque en menor medida.
- De las barricas de roble: Cuando el vino se envejece en barricas de roble, puede adquirir taninos adicionales del propio roble, añadiendo complejidad al sabor del vino. Que puede ser diferente en función de si se ha utilizado roble francés o roble americano.
¿Qué tipos de taninos podemos encontrar?
- Taninos de piel: Son los más suaves y aportan una sensación sedosa. Se encuentran principalmente en la piel de las uvas y son responsables de la textura y cuerpo del vino.
- Taninos de semillas: Son más astringentes y pueden ser un poco amargos. Se derivan de las semillas de las uvas y, si no se manejan bien durante la vinificación, pueden dar una sensación de aspereza.
- Taninos de madera: Se obtienen del envejecimiento en barricas de roble. Aportan complejidad y notas de vainilla, especias y tostado al vino.
Los beneficios de los taninos
- Estructura y complejidad: Los taninos añaden estructura al vino, lo que le permite envejecer bien y desarrollar sabores complejos con el tiempo.
- Propiedades antioxidantes: Ayudan a conservar el vino, protegiéndolo de la oxidación y prolongando su vida útil.
- Sensación en boca: Los taninos contribuyen a la textura del vino, aportando una sensación aterciopelada o astringente que puede ser muy agradable.
Algunos “mitos” sobre los taninos …
Un mito muy común es pensar que todos los vinos con taninos son fuertes o desagradables. Sin embargo no es cierto, los taninos pueden ser muy suaves y bien integrados en vinos de alta calidad, proporcionan equilibrio y complejidad en el vino.
Además, aunque algunas personas creen que los taninos son los responsables de los dolores de cabeza, no hay evidencia científica que respalde esta afirmación. Los dolores de cabeza después de beber vino suelen deberse a otros factores como la histamina o el contenido de alcohol.
¿Cómo puedes disfrutar los taninos al tomar el vino?
Para disfrutar al máximo de los taninos, es importante maridar el vino adecuadamente:
- Carnes rojas: Los taninos se suavizan con proteínas, por lo que los vinos tánicos combinan perfectamente con carnes rojas.
- Quesos curados: La grasa de los quesos curados puede equilibrar la astringencia de los taninos.
- Platos ricos en grasa: Platos como el cordero o el pato también son excelentes opciones para acompañar vinos tánicos.
Curiosidad: Conservación del vino en la antigüedad
En la antigüedad, conservar el vino era un desafío significativo. Los antiguos griegos y romanos utilizaban técnicas como sellar las ánforas con resina de pino para evitar la entrada de aire y así preservar el vino por más tiempo. También añadían sustancias como el aceite de oliva sobre la superficie del vino para crear una barrera protectora.
Estas prácticas rudimentarias subrayan la importancia de la conservación en la vinificación, un desafío que los taninos y los sulfitos resuelven eficientemente hoy en día.
Conclusión ….
Los taninos son una parte esencial de la experiencia del vino, especialmente en los tintos. Aportan estructura, complejidad y longevidad al vino, permitiendo que se desarrolle y evolucione con el tiempo.
La próxima vez que disfrutes de una copa de vino tinto, tómate un momento para apreciar los taninos y cómo contribuyen a la complejidad y disfrute del vino.
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